sábado, 12 de mayo de 2012
Pongamos el infinito como límite a nuestros besos.
Hagamos de las miradas de un segundo caricias de una hora. Hagamos que el mundo se pare con cruzar una sonrisa... Hagamos que estando juntos el resto del mundo desaparezca por un rato. No me digas lo mucho que me quieres, llévame al infinito y así me lo demuestras. Hagamos que cada sonrisa, cada mirada, cada beso y cada abrazo quede para la eternidad en nuestra memoria, que si algún día pasa algo entre nosotros, sea para siempre...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario